No hay duda de que las canas están de moda; sobre todo en las mujeres, que suelen ser las primeras a la hora de ocultarlas. Y es que las normas al uso son más exigentes para ellas. Un hombre con canas gana atractivo; por el contrario, una mujer lo pierde. Esa es la pauta. ¿A quién le gusta parecer viejo? El pelo gris indica la suma de los años; de un modo u otro, muestra que la vejez se acerca. Por lo tanto, su disfraz es casi un obligación. El canon impone su criterio: la mayoría de las mujeres con canas se tiñe el pelo. No obstante, hay excepciones; también los hombres se tiñen.
Cuando las canas se muestran con orgullo
La juventud ha sido objeto de veneración a lo largo de la historia. Y hoy no lo es menos. Por fortuna, hay cosas que cambian. No son pocas las mujeres que están en contra de disimular las canas. Se trata sin duda de un paso más en la lucha por dejar de cumplir un patrón estético que las obliga a no ser como son en realidad. Es de ley reconocer que el confinamiento jugó su papel en el cambio. En los primeros tiempos de la pandemia, las peluquerías cerraron y eso hizo que muchas mujeres cambiaran de aspecto.
Y no deja de crecer el número de las que se suman a la práctica. El pelo sin teñir ya no es lo que era. De dar una imagen de descuido y abandono ha pasado a ser una muestra de libertad. Las famosas que hacen gala de su pelo gris y lo exhiben con orgullo no son pocas; también los famosos. Lucir las canas con naturalidad es un paso en contra de ocultar los años. Es de esperar que su aceptación haya venido para quedarse y no sea una moda más. La utopía de la eterna juventud se diluye. En este sentido, bienvenidas sean las canas y el resto de huellas que el paso del tiempo nos brinda. El reto está en sacar partido de ello.
