HelpAge España ha llevado al Senado el proceso de envejecimiento. Y lo ha hecho de la mano de su presidenta, Isabel Martínez. La razón es que se ha creado una ponencia para su estudio en el seno de la Comisión de Derechos Sociales. El objetivo es la redacción de un informe sobre la realidad de la vejez en el momento actual y, a la par, con recomendaciones que permitan abordar el reto del mejor modo. Es de celebrar. El escenario demográfico no solo ha cambiado, sino que lo hará más en el futuro.
El proceso de envejecimiento en el siglo XXI
Los Mayores cuentan para HelpAge. Es el lema de la organización y, como no podía ser de otra forma, se esfuerzan por ellos. Martínez puso sobre el tapete los problemas que atañen al colectivo; unos problemas, por otra parte, que no son nuevos, si bien la crisis por la Covid-19 los ha puesto de relieve con más brío. Y los fue desgranando uno a uno ante la comisión. No dejó nada en el tintero; se puede comprobar que las demandas son muchas y de muy variada índole.
Solicitó apoyo para la Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas Mayores; un enfoque de la vejez basado en derechos, no en la asistencia social; una ley de igualdad de trato, con la edad como circunstancia a destacar; un plan de choque de refuerzo de la atención, al menos mientras dure la pandemia; la reforma de la Ley de promoción de la autonomía y atención a la dependencia; la propuesta de una Ley integral de los derechos de las personas mayores; el rediseño de los modelos de cuidados de larga duración; la coordinación sociosanitaria; la profesionalización de los cuidados; la apuesta por un tercer sector de acción social sin ánimo de lucro, frente al logro económico hoy; la garantía del control e inspección de la atención a los mayores por parte de la administración pública; por último, campañas de concienciación sobre los derechos de la personas mayores.
No se puede pedir más; pero esto no es sino un resumen muy somero. Merece la pena leer su intervención a través de este enlace.
