Sacarle algo a la vida: eso es lo que intenta Hendrik Groen a los 83 años y cuarto. Y nos lo cuenta a través de un diario. Ningún medio se ha referido al libro en fechas recientes; no se trata de una novedad, puesto que se publicó hace ya tres años, en 2016. En aquel momento, en Holanda, el país de Groen, se convirtió en un superventas. Yo lo he leído en estos días y me ha sorprendido. Y creo que debo recomendarlo en un portal que trata sobre los mayores y la vejez. Habrá muchas personas que aún no conozcan el libro y, a mi juicio, su lectura es muy provechosa.
¿Cuál es el mejor modo de sacarle algo a la vida?
El diario de Hendrik Groen mezcla la sonrisa con la tristeza. Y lo hace con grandes dosis de humor. En realidad, se desconoce la verdadera identidad de su autor; pero sea quien sea, retrata de un modo magistral el modo de vida de un geriátrico. Y, por supuesto, de las gentes que lo habitan. La residencia de nuestro protagonista se llama El Ocaso y está situada al norte de Ámsterdam. Él es educado, sensato, atento y no acostumbra a decir a los demás lo que piensa. Sin embargo, decide cambiar; considera que es el momento de sacarle algo a la vida. Y busca cómo. A partir de ahí, narra sus peripecias y las de quienes le rodean. El personaje se vuelve entrañable a lo largo del libro.
El autor del diario dibuja el modo de vida en una institución que, por cierto, no sale muy bien parada. Sabemos que, en ocasiones, no son ejemplos de buen hacer. Aunque en pocos casos los problemas son así de graves. La directora del centro es arrogante; el personal tiene una escasa motivación, fruto de sus condiciones de trabajo; las familias se muestran ajenas al drama de los mayores por vivir lejos de ellas… Nada que no se conozca. En el fondo, el relato es una reflexión sobre el final de la vida y las circunstancias que lo rodean; por tanto, puede que no agrade a todo el mundo. A mí sí me ha gustado. ¡Y mucho!
