Actualidad sobre personas mayores

Escribir sin edadismo: una útil guía de estilo

Escribir sin edadismo

Escribir sin edadismo es una guía de estilo para los profesionales de la comunicación. En realidad, no se dirige solo a ellos; va más lejos. Muestra de un modo realista la imagen de los mayores de hoy. Se ha editado en Chile, pero no hay duda de que su interés traspasa las fronteras del país. La guía pretende ilustrar sobre el modo en que la sociedad se refiere a las personas mayores y el envejecimientoY es que los estereotipos que rodean a la vejez se adquieren en el día a día de la socialización y están muy presentes en la vida cotidiana. Son creencias sin fundamento que se aprenden en la niñez; se mantienen en la juventud y la adultez; y, más tarde, traspasan la frontera de la vejez.

Una vez ahí, los propios mayores sufren tales estereotipos. Por una parte, porque asumen en sí mismos el daño que se deriva de ellos. Por otra, porque el rosario de actitudes y prácticas que coarta su libertad vulnera sus derechos. Es decir, dan por válidas, y por lo tanto admiten, las reglas no escritas que los discriminan. Y, en consecuencia, se convierten en ciudadanos de segunda categoría. 

La importancia de escribir sin edadismo

 

Se miren como se miren, hay frases y términos sobre la edad que desprenden prejuicios. Tanto de elogio como de desprecio. «Qué joven pareces» es una cortesía que gusta a todo el mundo. Sin embargo, encierra un gran rechazo a la vejez. Al parecer, cumplir años y arrugarse es malo. ¿Es mejor dejar de hacerlo?  Y qué decir de «nuestros mayores«, que desborda un paternalismo fuera de lugar. Por no hablar de «abuelitos» o «abuelitas«, de una familiaridad que roza la falta de respeto.

Los mayores no son objeto de la caridad ni de la lástima, sino sujetos de pleno derecho, en pie de igualdad con respecto al resto de la sociedad. Y es un deber de todos vigilar que lo sean. Y una buena herramienta es la guía de la Fundación GeroActivismo. Este es el enlace para su descarga. ¡Será un gran éxito! Por suerte, cada vez se habla más de los mayores